Un poco de historia:
El Lockheed Martin-Boeing F-22, un caza furtivo de 5ª generación, está actualmente en servicio en las Fuerzas Aéreas estadounidenses. Se distingue por su concepto y diseño innovadores, equipado con dos motores turborreactores Pratt & Whitney F119 de postcombustión capaces de generar empuje vectorial mediante el movimiento de las toberas. El sigilo de este avión se basa en formas cuidadosamente estudiadas y en el uso de materiales compuestos diseñados para minimizar la firma radar. Se ha prestado gran atención al diseño de las tomas de aire y las toberas para reducir el calor generado y las emisiones de ruido.
El armamento, tanto aire-aire como aire-tierra, está alojado en búnkeres en el interior del fuselaje, minimizando la sección frontal y reduciendo la detectabilidad por parte de los radares enemigos. La aviónica de este caza es extremadamente avanzada, capaz de detectar, rastrear y adquirir objetivos incluso a larga distancia.
Peligro de colisión.